miércoles, 18 de julio de 2012

Helado de vainilla y consejos para preparar helado

Pin It Ahora!


Me he comprado una heladera. Sí, sí, pese a que mi cocina no llega a los siete metros cuadrados tengo otro chisme nuevo para ocupar espacio. Así que, dadas las estrecheces que veis que tengo, no me queda más remedio que sacarle mucho partido. Este verano voy a experimentar con los helados, espero daros muchas buenas noticias. Se trata de la heladera del Lidl, que todos los años a principios de verano suele sacarla por un precio bastante bueno (unos 23 €). Estoy muy contenta con el resultado.

Para iniciarme en este mundillo quería empezar con uno de los grandes clásicos de los helados (ya habrá tiempo de ponerse creativa y experimentar con sabores más originales), así que hoy os traigo un helado de vainilla. Este helado formaría parte de los que son tipo crema, con una base láctea,  y que para conseguir esta textura utilizan una gran proporción de grasas gracias a la nata/leche y a las yemas de huevo. El otro tipo de helados serían los que son tipo sorbete, con una base de frutas y almíbar (podéis ver los Polos rojigualdas que preparé para la final de la Eurocopa).

Este es un helado que alimenta de verdad, elaborado a partir de una crema inglesa. Lo acompañé con unas tejas superfinas de pasta de estarcir que próximamente os enseñaré y con las que aproveché parte de las claras que sobraron de esta receta. Ambas recetas las cogí del libro "Guía completa de las técnicas culinarias. Postres" de Le Cordon Bleu. El libro es una auténtica maravilla, os lo recomiendo al 100%, no tanto por las recetas (que también están muy bien) sino por las técnicas, procesos, detalles, ideas... que aporta. Si os apetece salivar de manera desenfrenada echadle un vistazo al libro.




Ingredientes:

- 1 vaina de vainilla
- 500 ml de leche
- 6 yemas de huevo
- 120 gr de azúcar glas (o 150 gr si no se dispone de azúcar invertido)
- 1 cucharada de azúcar invertido
- 100 ml de nata líquida de montar



Preparación:

1. Abrir la vaina de vainilla a lo largo y con la ayuda de un cuchillo raspar las semillas. Poner en un cazo junto con la leche y el azúcar invertido a fuego medio. Hervir.

2. Batir las yemas con el azúcar hasta que blanqueen.

3. Verter la leche sobre las yemas sin parar de mover para evitar que se cuajen.

4. Poner de nuevo la crema resultante a fuego lento, removiendo continuamente con cuchara de madera y escaldar. Cuando al sacar la cuchara y pasarle el dedo a lo largo quede dibujado nuestro rastro estará lista la crema. Dejar enfriar.

5. Una vez que la crema se haya enfriado, montar ligeramente la nata y mezclar con cuidado con la crema. Dejar enfriar en el frigorífico al menos cuatro horas.

6. Montar la heladera según las instrucciones, ponerla a funcionar y verter la crema de vainilla. Dejar mantecar el tiempo necesario (una media hora). Una vez que la mezcla ha cogido una consistencia cremosa volcar rápidamente a un recipiente y congelar para que el helado termine de madurar.


Consejos:

1. Meter la cubeta de la heladera al menos 24 h antes en el congelador y si es posible algunos días antes.

2. La crema base para hacer el helado no debe hervir puesto que pueden cortarse las yemas. En  caso que esto ocurra, retirar del fuego y pasar la batidora de mano hasta que quede una crema lisa.

3. El azúcar invertido ayuda a darle cremosidad al helado. Hay muchas recetas en internet y es muy sencillo de preparar, pero si no queréis utilizarlo no es necesario.

4. Si no tenéis heladera podéis preparar vuestro helado de manera manual, para ello deberéis meter la mezcla en el congelador (a ser posible en un recipiente metálico) y remover la mezcla cada 30 minutos.

5. La crema debe estar lo más fría posible, eso facilitará el proceso y reducirá el tiempo necesario para "mantecar" el helado.

6. Los helados a base de leche y crema necesitan "madurar" un tiempo para realzar al máximo su sabor. Déjalos reposar  una hora como mínimo a partir del momento en que el helado se ha endurecido para permitir que sus aromas se acentúen.

4 comentarios:

  1. Vivan las heladeras del LIDL!!!!!! Y los helados caseros!!!! Enhorabuena!!!

    ResponderEliminar
  2. ¡Vivan! Y que sigamos con la ilusión de entrar a la cocina a experimentar, y que nuestra familia nos recompense el tiempo invertido con esa sonrisa y un buen relamido de dedos.

    ResponderEliminar
  3. El helado de vainilla es mi preferido yo lo como en cualquier estaciòn del año,ahora que tengo la receta ya no tengo que ir a la heladeria.Besos.Paola L.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues anímate a prepararlo, Paola, porque tendrás la satisfacción adicional de haberlo preparado tú, y eso está muy bien. Ya me contarás si lo preparas. Un saludo.

      Eliminar